En los veranos, las condiciones actuales de la mayoría de las naves generan situaciones de estrés térmico en las ovejas de ordeño lo que limita su potencial productivo. El análisis efectuado indica que posiblemente muchas de las naves actuales están a merced de la climatología exterior por lo que serían necesario reformarlas permitiendo optimizar su ventilación y disminuir su temperatura interior, mejorando el bienestar ambiental de las ovejas.
En los primeros 100 días de lactación, las ovejas paridas en abril produjeron una media de 374l/oveja, lo que supuso 53l/oveja más que los producidos por las ovejas paridas en julio (321l/oveja), es decir, un 16,5% más.
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Para el verano 2025 no se espera que las condiciones mejoren, es más, podrán empeorar.
MÁS BIENESTAR. MÁS SALUD. MÁS RENTABILIDAD.

